lunes, 19 de diciembre de 2016

El glamour del simplismo pedagógico

Y a esto le decimos innovar. 

Quien ha elaborado este esquema que pretende ilustrarnos de manera maniquea sobre lo malo y lo bueno, debería revisar la etimología de "explicar" y "enseñar".


Y el autor del siguiente y, sobre todo, quien lo hace circular profusamente por las redes sociales como las nuevas Tablas de la Ley pedagógica, debería consultar con el sentido común. Fíjense ustedes en estas joyas:
  1. "Hoy en día gracias a los avances en neurociencias se ha descifrado el funcionamiento del cerebro para comprender los procesos biológicos del aprendizaje".
  2. "Una atmósfera de alerta relajada"
  3. "El aislamiento o fracaso social, está [la tilde la pongo yo] relacionado con un menor número de células [lo mismo] cerebrales".
  4. "Bajo ninguna circunstancia deben ser más de 15 mn consecutivos de contenido".
  5. "La pérdida de memoria después del aprendizaje es enorme, al cabo de 24 horas el 80% de los detalles pueden perderse"
  6. El ejercicio. Para ... aumentar la neurogénesis".
  7. "Los mejores profesores son los compañeros de clase".


















Y con estas herramientas vamos construyendo el futuro.

¿No debería alzarse alguna voz en las facultades de educación contra esta bazofia? ¿No deberían actuar los pedagogos ante los farsantes con el rigor de los colegios de médicos?

36 comentarios:

  1. En las facultades de educación hay alguna voz que se alza, pero son pocas. A mí me gustaría que los padres (las madres), en lugar, de hacerse seguidores de todas estas estupideces, se plantaran ante lo que nos viene.

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    1. Se alza... pero bajito, no sea que los vayan a tildar de conservadores. Toda esta "bullshit" está comenzando a adquirir proporciones de epopeya.

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  2. No se si alegrarme de estar un poco apartado del mundo educativo. Lo de alhora es un torrente desbocado... Hasta que la lluvia amaine, no se oirán otras voces. Demasiado ruido.

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  3. Somos la luz contra las tinieblas. Esa fue la primera idea que capté de la neopedagogía así que entré en el CAP. Obviamente, eso me bastó para saber que yo habría de estar en el lado oscuro.

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  4. Algunos lo intentamos...Fomentar el espíritu crítico docente y la lucha contra la pseudociencia...

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    1. ¡Qué tiempos más extraños, en los que la lucha contra la pseudociencia es la empresa de "algunos" en las facultades de educación!

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  5. El mandamiento segundo del heptálogo es un hermoso hierro de madera. (Sin desmerecer los otros preceptos.)

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  6. El que diseñó la tabla "Explicar" contra "Enseñar" (sí, a alguien se le ocurrió poner un versus entre explicar y enseñar, manda huevos) al final abrió la cola como los pavos reales. Pero solo había machos cerca.

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  7. Lo que me sigue inquietando es la capacidad de omnipresencia en todas estas lides de Telefónica: tanto te monta esta maravilla de dibujito, como hace un programa en TVE ("Poder canijo"), como tiene contrato con el Departament d'Ensenyament (aquí en Catalunya). ¡Esto sí que es crear una atmósfera de alerta! Aunque ignoro si relajada...

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  8. Telefónica, Banco de Santander, Planeta, La Caixa... entre el silencio de los corderos

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  9. Lo singular es que una consejera de educación te confiese que se ve obligada a apoyar a los innovadores, no porque crea en sus ideas, si no porque de no hacerlo, se podría creer que es conservadora

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  10. Yo siempre preferí que me explicaran las cosas. Así las entiendo y así las recuerdo. Cuando me han intentado enseñar, me he vuelto en contra. Un buen profesor puede salvarte la vida, el futuro, la profesión, aunque vengas de un lugar terrible. Considero que es obsceno el control de los profesores. Transmitir (que no impartir) es una técnica creativa y artística y limitar esto, limitar a una persona considerablemente especial y única como para haber decidido dedicar su vida a la transmisión de conocimiento, aún sabiendo que será poco valorado y recompensado, cuando no criticado y rechazado, es una agresión a la idea misma de sociedad.

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  11. "Explicar", de hecho, es una actividad mucho ma´s compleja que "enseñar". "Enseñar" es mostrar, dirigir hacia, orientar la mirada; mientras que "explicar" es desplegar algo para que lo implícito se muestre explícito. Por otro lado "escuchar" es una actividad que puede ser más o menos compleja según sea lo que te enseñan oralmente.
    Pero lo divertido está en el segundo gráfico, ya que alguien que cree que "las neurociencias han desvelado el funcionamiento del cerebro" nos muestra ese desvelamiento de manera bien singular.

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  12. Explicación - del latín “explicatio”: acción de desplegar o desenvolver - etimológicamente viene a significar el hecho de 'desplegar' lo que estaba doblado (plegado, implicado) y oculto en su interior, que no es visible o perceptible a la razón, haciendo comprensible lo que en un primer momento no lo sería.

    Enseñanza - del latín “insignare”, que a su vez está formado por in (en) y signare (señalar). Signare proviene de signum (seña, indicación o marca), y signum viene del indoeuropeo sekw, que significa seguir. Todo ello transmite la idea de indicar una dirección a seguir.

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  13. "¿No debería alzarse alguna voz en las facultades de educación contra esta bazofia?" Pregunto: ¿Y no podríamos alzarla quienes todavía parecemos conservar el sentido común? Como alguien dijo hace poco, "estamos más callados pero somos muchos más". No sé el camino: ¿Un manifiesto, una asamblea en Madrid y la creación de un Colectivo que publique cosas, aúne esfuerzos, concentre ideas y ayude a que más y más gente se atreva a alzar la voz contra estos charlatanes? ¿O estoy desvariando...?

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    1. No, no estás desvariando, pero los que forman a los futuros maestros tienen una especial responsabilidad.

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    2. ...tot el poder, la confiança i l'amén de les institucions

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  14. Un primer paso podría ser la creación de una asociación o web de maestros que basen su trabajo en prácticas fundamentadas en la evidencia y que no caigan en la pseudociencia y bazofia que muestran los esquemas que nos ha compartido Gregorio.

    Un ejemplo podría ser el de esta web que ahora lleva un tiempo parada: http://www.evidencebasedteaching.org.au

    Si alguno se anima a lanzarse a esta empresa puede contar con mi colaboración.

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  15. Andrés, la idea me parece más que interesante: una asociación "a favor de las evidencias". Si te atreves, cuenta conmigo para lo que quieras.

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  16. Perdone, don Gregorio, pero voy a hacer un poco de abogado del diablo.

    «A favor de las pruebas» —yo diría que «evidencias» son «obviedades» en español— estará todo el mundo. El detalle problemático está en qué se quiera probar.

    El sentido común me temo que es también mal argumento. Porque todo el mundo se cree ser uno de sus representantes más acreditados.

    No me entienda mal, no creo que no sea verdad —y una verdad muy sensata— todo lo que plantea, don Gregorio.

    Argumentativamente, apelar a las «pruebas científicas» o al «sentido común» puede ser también un modo de descalificar a la otra parte como interlocutora válida.

    De hecho, creo que es lo que hace de modo claro —aunque no totalmente explícito— la neopedagogía. De cuya propuesta no dudo que sea bazofia intelectual.

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    1. Pablo, sinceramente, bien venidas sean las apostillas, críticas, abogados del diablo e, incluso, enmiendas a la totalidad. Si criticamos a algunos de estar cerrados en su caverna, sin dejar pasar ni un rayo de crítica; mal haríamos imitando lo que criticamos.
      1. Lamentablemente a favor de las "evidencias" no está todo el mundo. Hay mucha gente blindada en sus principios, y son tan altos, que no se molestan en analizar cuáles son los efectos prácticos de su aplicación. Más aún; hay quien considera que toda evaluación es segregadora.
      2. Yo reivindico el sentido común que se expresa en el lenguaje natural de las familias. Cuando -como oí recientemente- una madre es capaz de decirle a otra que sus respectivos hijos estaban interactuando, cuando simplemente estaban jugando a canicas, es que el sentido común está perdido. Lo mismo le digo de nuestros intentos por ocultar la inteligencia y sus efectos en las prácticas escolares.
      3. La neopedagogía, es, bñasicamente, un antiintelectualismo.

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    2. Don Gregorio, trato de contestar.

      En contra de lo evidente o de las pruebas (déjeme chapotear en la ambigüedad) no creo esté nadie. Lo que pasa es que considerará evidente otras cosas, como el blindaje de sus altísimos principios.

      No se preocupe, no soy relativista. Creo que sería más acertado quizá sembrar la duda de si acaso no podrían (los neopedagogos) llegar a estar haciendo las cosas mal. Ya sé que lo sabe, pero ellos no.

      En mi pueblo, llamar «interactuar» a jugar a las canicas es una pedantería irremediable. Si lo piensa, al menos semánticamente, suena raro que el sentido común esté perdido. ¿Dónde o en qué se fundaría la comunidad de sentido entonces?

      Muchas veces los anti-ísmos (si me permite la barbaridad anterior) se basan en dos cosas: la incomprensión básica de aquello que critican y la necesidad de crear un gigante al que poder enfrentarse (desde el que poder definirse por negación).

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  17. Contad conmigo para esa empresa. En Andalucía sufrimos con especial intensidad este tipo de disparates. Y a mi no solo me preocupan los profesores de las facultades, me preocupa especialmente que ese tipo de cosas constituyen las referencias pedagógicas de inspectores y directores.

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  18. ¿O era con mi hacha? Bueno, es igual. Cuenten conmigo para lo que sea. Yo diría que más sentido común (que, en efecto, puede ser un término poco fiable), habría que recurrir a la experiencia y a la evidencia.

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  19. Estoy dispuesto a defender el sentido común a capa y espada. Para mi esta es una cuestión central.
    Lo que quiero decir, en definitiva, es que cuando la educación no sabe o no quiere hablar el lenguaje de la calle, no está cumpliendo su cometido. Hoy resulta evidente que no quiere hablarlo porque cree disponer de unos saberes técnicos que le permiten entender la experiencia educativa como algo derivado de su teoría de la educación. Cuando se actúa así, lo que se resiente (en la pedagogía y, en general, en el conjunto de las llamadas ciencias humanas) es el sentido de la prudencia. El sentido común es imperfecto, pero dúctil, por eso sabe que tiene que recurrir a la prudencia.
    Cuando se ignora el lenguaje común (que es la expresión del sentido común) se ignora también la manera en que las personas se entienden a sí mismas.

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    1. Ay, el sentido común de "las familias" es el que más preocupa...

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    2. A las familias las hemos desorientado entre todos.

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    3. Eso no se lo discuto. Pero hay familias que se desorientan antes que otras, también le digo. Y las hay que no saben por dónde les da el aire. Y eso sí es peligroso, porque nos lleva a la campaña de la CEAPA y a hablar del maltrato psicológico que damos a los alumnos cuando les ponemos deberes para casa.

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  20. Qualsevol que hagi entrat en una aula de Secundària durant només una setmana sap perfectament que de les "frases" que hi ha en els cartells no n'hi ha ni una que s'aguanti. Prou sabem que les institucions educatives donen el vistiplau i promouen aquesta caterva d'enzes que fan de catalitzadors i distreuen la gent de les polítiques educatives tant nefastes que des de 1990 estan destruint el país.

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  21. ""Una atmósfera de alerta relajada" Ja,ja,ja!! La cuadratura del círculo...

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