martes, 6 de febrero de 2007

Marx y los marxistas

I

Don Enrique Tierno Galván es una de las figuras más mitificadas de la izquierda española. Sin duda tendría muchas virtudes para merecer su catasterismo. Pero el Viejo Profesor también tenía sus momentos de diabetes intelectual. Aquí os traigo un ejemplo digno de contar en cualquier antología de la beatería progre más edulcorada: “el matrimonio entre Karl y la hermosísima Jenny fue una anticipación de la pareja que el socialismo busca: una unión en que la sexualidad se disuelva en el amor y la convivencia continua no engendre el resentimiento".

II

Que le responda el propio Marx: "Entre la filosofía y el estudio del mundo real media la misma relación que entre la masturbación y el amor sexual".

13 comentarios:

  1. Tierno era muy tierno...
    ¿No te animarías a participar con algún personaje en la historia de la reina Dido? Puede resultar emocionante. ¿Qué tal Acates, amigo del alma de Eneas?. Ya me dirás. Besos, querido amigo.

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  2. Recuerdo un artículo antiguo de alguien tan poco sospechoso de ser un malvado neocón como Juan Goytisolo en el que atizaba de lo lindo a "fray Tierno" por ese tratamiento untuoso-revolucionario de lo que no tiene enmienda. Es que dan ganas de pegarse una ducha después de leer la frasecita del Viejo Profesor.

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  3. Bueno, posiblemente la frase del profesor viene a cuento (es una posibilidad) de su experiencia con su inefable doña Encarnita, que a todas partes le acompañaba con sonrisa seráfica aunque quienes la conocieron decían que mandaba mucho.

    Yo creo que Tierno soltaba frases para quienes le escuchaban y en eso me parecía muy listo. Según fuera el público, don Enrique le halagaba el oído con frases desde la altura y esa que citas me parece una de esas, pero en el Ayuntamiento era otra cosa: gobernaba y mandaba. Pkngo por testigo a algunos que fueron concejales con él y sobrevivieron.

    Yo tuve algunos encuentros con él y asistí a su entierro en la calle Alcalá. Fué impresionante y eso me lleva a hacerme la pregunta: ¿de quien es la imagen? ¿de quien la proyecta o de quienes la interpretan?

    Cuesta olvidar el coche de muertos con dos caballos y el cochero de chistera y cabello blanco, por cierto, llegados de barcelona, avanzando por encima de un océano de cabezas silenciosas y manos que aplaudían. cientos de miles.

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  4. Isabel: El tiempo se me ha ido de las manos como el agua de una canastilla de mimbre. No paro de llenarla y siempre la tengo vacía.

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  5. Chema: El texto aparece en una selección tiernista de textos de Marx, a modo de presentación.
    Tengo que hablar del Marx gamberro.

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  6. Luis: en este país nos encantan los muertos. ¡Cómo los queremos!
    A mi me costaba tragar a los tiernistas del PSP, que combinaban la voluntaria sumisión intelectual (no poco estalinista) a la palabra profética del V.P. con un aire muy cuidado de vanguardia elitista.
    Sin embargo parece evidente que sin carisma (y el carisma, la ideología e incluso la inteligencia, son cosas distintas) no dura un político dos días.
    El carisma justifica los errores del político.

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  7. Hay por lo menos 3 Tierno:
    1 / el catedrático que se suma al movimiento estudiantil y pierde la cátedra
    2 / el hombre teórico del PSP, que hizo un partido marxista con mimbres extremadamente burgueses y cantidades de niños bien (basta pensar en Morodo y Bono) a imagen y dessemejanza del MSC catalán ex Poum que se convertiría en PSC y CSC y luego en PSOE con adherencias de niños bien bien Felipes
    3/ el alcalde, donde creo que alcanzó la dimensión que le correspondía.

    Lo pusieron de alcalde porque no cabía en el PSOE oregánico.

    Disiento en una cosa: Tierno encantaba vivo y se le recuerda muerto. Yo conocí su popularidad en vida, independientemente de su acierto era tremenda, enormemente poipular, era un personaje entrañable, con carisma ganado a pulso desde su propia torpeza, si es que lo era. La leyenda Tierno fué en vida, de ahí el entierro. En su caso no gustan los muertos, está olvidado en el recuerdo de pasada; fué en vida, te doy fe.

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  8. Luis, me corrijo. Tienes razón.

    En cuanto a los avatares que hemos tenido que ver: Me aseguran que Bono ha acabado teniendo como colaborador personal, en cada uno de sus cargos a aquel "Camarada Sanromá", que fue el secretario general de la marxista ORT.

    Igual hasta tenemos salvación... si a pesar de todo lo que hemos visto aún no somos completamente cínicos.

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  9. Lo de Sanromá no lo sabía, paradójico, ¿no? Tanta guerra para nada (el sustantivo guerra es irónico)

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  10. Eso mismo me pasa a mí, gregorio, por eso he decidido irme de viaje con la reina Dido. Allí el tiempo adquiere otra dimensión. Si te decides en algún momento a acompañarme, no tienes más que pensar un nombre y una actividad que te apeteciera desarrollar en aquellos lejanos tiempos. Mira si es fácil. Lo demás, corre de mi cuenta.
    ¿Por cierto, has leído el artículo salido el miércoles 7 en el País sobre el libre albedrío? Besos.

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  11. Isabel: Si me pudiera colar en tu historia -de la que como bien sabes, soy adicto fiel- elegiría inmiscuirme como un filósofo cínico, deslenguado, maleducado, incluso soez a veces, mal vestido, con la única protección de su manto desgastado y su bastón, pero que nunca está dispuesto a renunciar ni a su libertad de palabra ni a la crítica de las prótesis culturales. Es que me pillas leyendo la crítica del emperador Juliano a los cínicos.

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